Encuentro Alumni FIUM: panelistas destacados reflexionaron sobre el futuro de la Ingeniería
El evento contó con la participación de Amílcar Perea, Secretario General de la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI); Mercedes Aramendía, presidenta del Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (CONICYT) y de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (URSEC); Flavio Caiafa, presidente de la Agencia Nacional de Investigación de Innovación (ANII); Alejandro Ruibal, presidente de la Cámara de la Construcción del Uruguay; y Rafael Sotelo, decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Montevideo.
Cada uno de ellos ofreció su perspectiva sobre el futuro de la ingeniería. Rafael Sotelo, en su discurso inaugural, destacó la relevancia del tema: “Esperamos que esta reflexión sobre el futuro de la ingeniería tenga un gran impacto y nos ayude a todos a pensar en cómo podemos contribuir desde nuestras respectivas áreas”.
Mercedes Aramendía, que a su vez es alumni de la Facultad de Derecho de la UM, enfatizó la importancia del trabajo multidisciplinario en la ingeniería moderna: “Lo que he visto es los diversos roles que tiene que llevar adelante o que llevan adelante los ingenieros”. Destacó el trabajo multidisciplinario que llevan adelante en CONICYT, con un equipo que incluye ingenieros, contadores, economistas, abogados, entre otros, y cómo el rol que cada uno desempeña en el equipo aporta y ayuda muchísimo para que puedan cumplir con los diversos objetivos que tienen. “En este sentido, lo que me interesa destacar es la importancia de la colaboración y el trabajo en equipo, con equipos multidisciplinarios e interdisciplinarios”.
Por su parte, Flavio Caiafa reflexionó sobre la transformación digital y su impacto en la ingeniería. Para él, esta tiene un impacto positivo y es un factor clave para la eficiencia de la ingeniería. Cree que hay que “abrazar” a la tecnología digital, teniendo presente tanto sus ventajas como desventajas. Agregó que le parece importante que las universidades y las empresas trabajen juntas para aprovechar al máximo estas oportunidades. Para él la ingeniería del futuro es la de siempre, pero con desafíos más ricos. “Lo que hay que hacer es tener la mente abierta y la capacidad para seguir aprendiendo toda la vida y aportando valor”, reflexionó. Destacó que para innovar hay que ir en contra de los patrones ya establecidos y entender que las cosas siempre se pueden hacer de forma distinta.
“¿Qué sería el futuro sin la ingeniería?”
Alejandro Ruibal, quien ha combinado su formación en ingeniería con habilidades en gestión, destacó la responsabilidad de los ingenieros en el futuro. Reformuló el título del panel y preguntó: “¿Qué sería el futuro sin la ingeniería?”. Subrayó el rol protagónico que tiene la profesión en hacer del mundo un lugar más sostenible y eficiente. Las habilidades que desarrolla un ingeniero, en donde están formados mentalmente para resolver problemas y buscar soluciones, con una capacidad de transformar las cosas a un mundo más práctico, son clave para el futuro. “Tenemos un rol protagónico en el futuro”, afirmó.
Amílcar Perea, desde la perspectiva de la tecnología de la información, recalcó la importancia de esta industria en la economía uruguaya y el impacto que tiene en otras áreas. Destacó la necesidad de que más gente se forme en tecnología y la estudie. Mencionó tres aspectos que las empresas necesitan de los ingenieros: que sean muchos más, que piensen en grande y que nunca pierdan el humanismo, el para qué hacen las cosas. “Creo que la ingeniería y en particular la tecnología de la información está llamada a transformar el mundo”, reflexionó.
Sobre el final del panel, Alejandro trajo un mensaje inspiracional: “Cualquier cosa que elijan en la vida, que sea lo que les da cosquillas en la barriga y que les dé pasión”. Rafael Sotelo destacó que encarar estos desafíos siempre está presente tanto en los docentes como en los alumnos, subrayando la importancia de la creatividad y la necesidad de resolución de problemas con ingenio y determinación.
El evento concluyó con un espacio para el networking, donde los asistentes pudieron compartir pizzas, bebidas y postres, en un ambiente distendido que facilitó el reencuentro entre graduados de diversas generaciones.
El Encuentro Alumni FIUM no solo ofreció una plataforma para discutir el futuro de la ingeniería, sino que también fortaleció los lazos entre los egresados de la facultad, creando un espacio de intercambio y aprendizaje mutuo.